UN ABRAZO DE OSO

El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso.
1 Corintios 13:4

 La importancia de una abrazo, esto es una gran muestra de apoyo, afecto y cercanía, y aunque personas no se han dado cuenta, es benigno para la salud de las personas. El abrazo comienza desde la concepción misma del bebé, cuando la madre lo lleva en su interior y posteriormente, lo abraza, lo mima y le da su pecho, entregando la oxitocina, conocida por ser la hormona del «apego». Así el bebé siente el abrigo de su madre y también seguridad y ternura. En el acto del abrazo se activan dos hormonas conocidas por la “felicidad” que experimentan las personas en el abrazo, la serotonina y la dopamina, según afirma la ONG, ABRAZARTE SIN FRONTERAS.

Así también lo afirma la doctora Kathleen Keating, en su libro “La Terapia del Abrazo”, ayudan no sólo a sentirnos bien, también favorece el buen desarrollo de la inteligencia en los niños, a superar los miedos y es un factor antienvejecimiento. Además, los abrazos pueden disminuir el apetito, combatir el insomnio, reducir la tensión y alentar el altruismo y la autoestima. El contacto físico del abrazo llena de energía tanto al que abraza como al que recibe el abrazo. Un estudio demuestra que las caricias y abrazos le hacen bien al corazón de la mujer.

Entonces, ¿estarías dispuesto a recibir o dar una abrazo a las personas que te rodean?, es simple, solo es acercarse, sonreir y abrazar. Hoy en día ya existe el tratamiento de salud llamado Abrazoterapia, con su propia página que da la vuelta al mundo. Puedes ver los eventos que están en youtube en relación de personas que salen a la calle ofreciendo un abrazo gratis.

Pensando en este concepto, que esencialmente radica en el amor, reflexiono, ¡que importante es el amor en toda orden de cosas!, y con que claridad nos dejó el mensaje nuestro buen Señor Jesús cuando nos visitó en la tierra. El iba entregando amor, sanidad y esperanza por donde iba, así mismo lo dejó muy claro el apóstol Pablo en su carta a los Corintios:

“Hay tres cosas que son permanentes: la confianza en Dios, la seguridad de que él cumplirá sus promesas, y el amor. De estas tres cosas, la más importante es el amor”. (Corintios 13:13)

Estimado lector, te invito a que practiques esta sencilla enseñanza, mas ahora que los tiempos difíciles nos hacen vivir con temor y muy poca alegría, empieza por tu hogar y sigue con tus amigos, vecinos y compañeros de trabajo, es posible que tu vida cambie y sea mas divertida.

Desde aquí me despido con un gran abrazo de oso, deseándote que Dios te guíe y te guarde.

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Si tienes problemas, esta trizte o lo estas pasando mal, escríbeme, te daré un gran abrazo y oraremos por ti.

Rafael Arriaza, es Chileno / Español, MBA en Economía por la U. Autónoma de Madrid y Empresario en Chile