El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece;
No hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;
No se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.
Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
Corintio 13:4-8
Es increíble pensar en estos días acerca del amor, tanta violencia, tanto odio que nos preocupa y nos deprime. El amor es un sentimiento divino que nos invade el corazón, digo corazón, porque desde siempre el hombre ha identificado el corazón como el lugar intimo donde se esconde el amor.
El amor tiene diferentes clases, amor filial a los hijos, el amor fraternal, a los hermanos, el amor de pareja, el amor grande y poderoso de Dios, y mas tipos de amor.
No cabe duda que el amor trae felicidad a las personas, sentirse amado y amar es la mayor expresión felicidad en las personas, pero también puede traer dolor y muerte.
Dios es amor, esto es, DIOS ESTA HECHO DE AMOR, no es que tenga amor, increíble expresión, para muchos inentendible, increíble, que alguien está hecho de amor, nosotros somos hechos de carne y huesos y no cuesta pensar en esta definición.
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Cuando nos enamoramos, y somos correspondidos, nuestra endorfinas aumentan, nuestra sonrisa es constante, nuestro carácter es mejor, mas dulce, mas afable y todo parece funcionar bien. Así los días son mejores, vemos los colores de las flores y escuchamos el canto de los pajaritos, realmente este estado es cuando vivimos mejor. El punto es hacer durar lo mas posible este sentimiento, este estado de felicidad, lamentablemente, a veces no vienen inconvenientes que estropean estos dulces momentos. Malos entendidos, desconfianza, celos, que bloquean nuestra felicidad.
Querido lector, piensa un momento, ¿Cuál es tu gran amor?, ¿Estas realmente feliz?, o al contrario, ya no lo tienes, lo perdiste, ¿lo olvidaste en el tiempo?.
Creo que nuestro principal motivo en la vida, debe ser el amor, buscarlo, encontrarlo y mantenerlo. No permitir que otros intereses en la vida nos quite esta gran felicidad del amor.
Un amor perfecto es el de Dios, El nos dio a su hijo unigénito quien se sacrificó a si mismo para nuestra salvación. Jesús cuando estuvo aquí en la tierra, demostró su gran amor con su ayuda a los suyos, a quienes los rodearon, incluso a los que lo maltrataron y lo mataron, esto si es una gran amor.
Querido amigo y amiga, te invito a practicar el amor, para ello es necesario la honestidad, la sinceridad y un buen carácter, solo con este carácter, nuestra existencia será de gran felicidad, no solo mi existencia, sino también la de las personas a mi alrededor, tu familia, tus amigos, en tu trabajo y mucho mas.
Ahora me despido, deseándote todo el amor de Dios, todo el amor a ti y a los tuyos y que esto permanezca en los tiempos y recuerda; DIOS TE AMA.
Rafael Arriaza, es Chileno / Español, MBA en Economía por la U. Autónoma de Madrid y Empresario en Chile.
