JEHOVA ES MI PASTOR

Jehová es mi pastor; nada me faltará.
Junto a aguas de reposo me pastoreará.
Confortará mi alma;
Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
Salmo 23

Querido amigo y amiga, en los días difíciles y complicados que  veces tenemos, muy normal en estos días, es bueno reflexionar en las escrituras de la biblia, que el buen Señor nos dejó.

El nos dice, nada te faltará, que te dará descanso y que incluso nos lleva a un lugar hermosos y apacible y nos cuidará. ¡Que amor nos ofrece el buen Dios.! Y aún mas, el nos guía por los caminos de justicia por su gran amor.

Muchas veces nos encontramos con días funestos, llenos de problemas, enfermedades y dolor, es en este momento que debemos arrodillarnos y recordarle a nuestro Señor, que se calmen las aguas y nos de la paz de su santa presencia con todo su gran amor.

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Querido amigo, esto que digo, es totalmente real, yo lo he experimentado en mi vida y te lo puedo asegurar, que siempre pude ver la luz al otro lado del túnel, Dios me protegió y sacó de este gran problema.

El Salmo 23 continua diciendo:
Aunque ande en valle de sombra de muerte,
Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.

Si estimado lector, de la mano del Creador, no tendrás temor alguno, porque Dios esta contigo, y no sólo esta contigo, sino que te guía en tus pasos, para que no tropieces o equivoques. ¡Grande es nuestro Dios!

El Salmo en su versículo 5 dice:
Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores;
Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.

Increíble, el salmista nos dice que el propio Dios  nos prepara la mesa antes nuestros enemigos, es decir, no solo te cuida y te protege, sino que también lo hace visible a quienes nos persiguen y además, te entrega y te cubre de protección y te da una paz que rebasa tu ser. ¿Hay alguien que te ofrezca tanto amor en esta tierra?

Y termina este salmo así:
Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,
Y en la casa de Jehová moraré por largos días.

Dios  promete a sus hijos grandes bendiciones en su vida, y que al final de sus dias, vivirán en la casa de Dios. Una gran promesa para todos sus hijos.

Querido amigo, ahora me despido deseándote que tu y tu familia vivan en la paz y el amor de Jehová.

Rafael Arriaza, es Chileno / Español, MBA en Economía por la U. Autónoma de Madrid y Empresario en Chile.