EL ESTRES

Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?

 Mirando una fotos de mi juventud, cuando aún estudiaba en el colegio Adventista de Chillan, me vinieron a mi memoria las imágenes hermosas y perfectas del maravilloso campo precordillerano del sur de nuestro país.

Caminando entre los frondosos árboles, la suave y fría brisa invernal, entre el musgo y el claro oscuro del bosque, caen los copihues, mas allá, junto a riachuelos fríos del deshielo invernal, se encuentras los sauces y florecen los aromos y las camelias con su exquisito aroma y color.  Hermosos recuerdos que creo no olvidaré.

En aquellos tiempos no existía mas preocupación que estudiar y sacar buenas notas: En este colegio y durante mi niñez y juventud, Dios me bendijo, y tuve todo lo necesario para mi simple vida, la comida, el vestuario y la familia.

Hoy, cuando ya han pasado esos hermosos recuerdos, me doy cuenta lo afortunado que era, aún cuando muchas veces renegué de los profesores, el colegio, mi familia y los deberes de estudiantes.

¿Cómo es mi vida hoy?, pues llenos de obligaciones y responsabilidades y aún cuando mis hijos ya crecieron, no hay día que no siento la necesidad de saber de ellos. ¿Qué ha pasado?, pues a veces me encuentro trabajando hasta tardes por la noches, otras resolviendo problemas con los bancos, proveedores (que están al otro lado del mundo), y si no con alguna inconveniencia en mi empresa.

SI, muchas veces estoy estresado. Pero logro superarme siguiendo los consejos que el buen Señor nos dejó, … a cada día su afán, (Mateo 25:34), además dentro de nuestra vida como adventista, guardamos el Sábado, esto quiere decir, no hacemos obra alguna desde la puesta del sol del Viernes hasta la puesta de sol de Sábado, solo llevamos nuestros pensamientos a la alabanza del buen Señor. No tienes idea el “reset” que esto significa, es como lubricar todas las pieza para que la maquinaria vuelva a trabajar tranquilamente.

Dentro de esta maraña de cosas diarias que todo el mundo pasamos, podemos superar el estrés, a mí me funciona. Como todos saben, el estrés es la enfermedad de este siglo, mata y enferma a millones de personas, por el estrés, existen crímenes, la gente baja sus defensas y enferma con graves consecuencias como el cáncer, entonces, defendámonos de este mal.

Es un buen consejo que evites el estrés con buenos hábitos protectores, como son, actividad física, la comida sana, y tu relación con el Creador.

Espero querido amigo que estas pocas líneas te sirvan y ayuden a salir del mal camino del estrés, yo lo estoy superando y deseo lo mismo para ti, que Dios te Bendiga grandemente y a toda tu familia.

Rafael Arriaza, es Chileno / Español, MBA en Economía por la U. Autónoma de Madrid y Empresario en Chile