INCERTIDUMBRE
Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán. Marcos 11:24
Han pasado ya siete meses desde que llegó esta terrible pandemia, que involucró al mundo entero, muchas personas han perdido su fuente de ingresos, han perdido sus seres amados, nos ha alejado de nuestros amigos y familiares, no podemos abrazar a nuestros padres, hijos, y estamos en la incertidumbre de cuando terminará esto, cuando volveremos a la normalidad que conocimos, la verdad es que todos, unos mas otros menos estamos sumidos en esta difícil situación.
Si bien es cierto que en el pasado de nuestra humanidad, han existidos otras pandemias, grandes guerras y desastres, nunca fue para toda la humanidad, en un tiempo fue en Europa o Asia, pero siempre quedaban continentes como Sudamérica, que no sufrieron tanto dolor y desesperanza.
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Hoy estamos viendo que las personas estan intentando reponerse, reiniciar sus labores en el comercio, otros esperando volver a las empresas que los suspendieron y otros a encontrar una empresa que los contrate, pero esto esta dificil y es incierto.
Entonces querido amigo, ¿que podemos hacer?, ¿podremos reintegrarnos a la fuente de trabajo?, ¿podremos salir a las calles sin peligro de contagiarnos de esta peste?, ¿volveremos a retomar nuestra vidas como en antaño?
Para mi esto solo tiene una solución; elevar nuestros ojos a Cristo, solo El nos puede ayudar. “Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán”. Romanos 15:13. Si estimado amigo, nuestra única esperanza ante la incertidumbre, es la oración, la fe y la lectura de las escrituras, en estos difíciles tiempos y también lo debemos hacer, en todo tiempo.
El apostol Pablo nos dice: Todos ustedes son hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús, porque todos los que han sido bautizados en Cristo se han revestido de Cristo. Gálatas 3: 26-27.
En mi personal experiencia, los momentos mas difíciles, mas inciertos, siempre recurrí a la oración, a las escrituras, y los Salmos de David me han dado mucha paz y tranquilidad, aquí te dejo algunos versos del Salmo 91:1-6.
1 El que habita al abrigo del Altísimo
Morará bajo la sombra del Omnipotente.
2 Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;
Mi Dios, en quien confiaré.
3 El te librará del lazo del cazador,
De la peste destructora
4 Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro;
Escudo y adarga es su verdad.
5 No temerás el terror nocturno,
Ni saeta que vuele de día,
6 Ni pestilencia que ande en oscuridad,
Ni mortandad que en medio del día destruya.
Te puedo asegurar que la promesa de este salmo me ha ayudado mucho, lo que dice es muy cierto, bajo el amparo de Jehová estará a salvo, nada malo te atacará, Dios cuida de sus hijos que le aman, que se acuerdan de El en sus oraciones, que agradecen sus bendiciones, que escudriñan sus escrituras y cumplen sus mandamientos.
Con la esperanza de haberte ayudado en tus horas inciertas, que tu y tu familia logren pasar por estos malos dias, me despido de ti y deseo que el amor de Dios te cuide y te guarde de todo mal. Dios te bendiga. Amen.
Rafael Arriaza, es Chileno / Español, MBA en Economía por la U. Autónoma de Madrid y Empresario en Chile
