Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. Mateo 6:6
Querido amigo y hermano, en estos día oscuros, cuando la pandemia nos quita la tranquilidad, la salud, y también a muchos su trabajo, cuando nos trastorna nuestra existencia. Es cuando mas debemos acercarnos a nuestra redentor. Sí así es, la única salida está en la voluntad de nuestro creedor.
Algunos amigos y conocidos míos se quejan que Dios no les responde, que no les escucha y están en un mundo sin esperanzas. Ahora yo me pregunto a que dios le esta clamando, a quien efectivamente dirigen sus plegarias, esto muchas veces no es al verdadero Padre a quien envía sus suplicas. Y para esto te contaré una historia real bíblica.
Existió en Israel un rey llamado Ocozías, este rey cayó por una ventana de su palacio, y estando enfermo, pide a uno de sus sirvientes que vayan a consultar a Baal-zebub dios de Ecrón, si el se va a sanar. Sin embargo cuando iban por el camino a preguntarle, aparece un angel de Jehová a Elias y le dice que le hable al siervo que había sido enviado por el rey y le diga: “¿No hay Dios en Israel, que vais a consultar a Baal-zebub dios de Ecrón?.
Y luego dice estas palabras para el rey: “Del lecho en que estás no te levantarás, sino que ciertamente morirás”.
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Así fue el final triste de la historia de este rey. Así también sucede a muchos creyentes que equivocan sus rezos y oraciones. En la oración que Jesus nos enseño dice: “PADRE NUESTRO QUE ESTA EN LOS CIELOS”, esto nos lo enseñó el propio Jesus, no nos dice que pidamos a una imagen, a una estatua, a una virgen, a una animita, es claro y determinante su enseñanza, es al Padre a quien debemos dirigirnos.
En el evangelio de Juan 14:13-14 nos dice:
“Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, esto haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré”.
Esto nos quiere decir, que una vez terminada la oración debemos decir: …”en el nombre de tu hijo Jesucristo de lo pido”
Querido amigo, una vez mas te lo digo, DIOS TE AMA, y quiere lo mejor para ti, ahora en los duros momentos que estamos pasando, pide a nuestro amado Señor, con fe y humildad, por tus necesidades, El te escucha y te responderá.
Desde aquí con mucha fe, esperanza y amor pido a nuestro buen Señor grandes bendiciones. Amen.
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Estimado amigo, si estas pasando por un mal momento, si la tristeza te alcanzó, escríbenos, con mucho gusto te apoyaremos.
Rafael Arriaza, es Chileno / Español, MBA en Economía por la U. Autónoma de Madrid y Empresario en Chile y adventista.
