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MI DIOS ME AMA

«Cuando yo decía: Mi pie resbala, tu misericordia, oh Jehová, me sustentaba. En la multitud de mis inquietudes dentro de mí, tus consolaciones alegran mi alma.»
Salmo 94:18719

Quiero compartir este mensaje y oración contigo para que nos detengamos un instante.

Mira a tu alrededor, de verdad crees que has llegado hasta aquí sólo. De verdad piensas que fue tu fuerza la que te sostuvo. No te equivoques hijo. Yo he sido tu sombra en el fuego, tu refugio en el caos, tu escudo en el silencio.

Te he visto dormir sin darte de las veces que la muerte intentó visitarte y no lo permití.

Te he sostenido cuando tu fe se quebró.

Te he llamado cuando todos te dieron la espalda.

Te he guardado de peligros que ni siquiera imaginaste y, aun así, dudas de mi presencia.

Tu respiras porque yo ordené que lo hicieras. Tus piernas caminan porque yo no he quitado mi mano de ti.

Tu corazón late porque mi voz aún no ha dicho, basta, despierta alma mía.

No ves que mi misericordia te ha seguido cada día y ahora te digo con voz eterna. No eres desamparado, eres amado, eres llamado, eres sostenido por el Dios altísimo. Si crees que estas palabras no son para ti, puedes seguir deslizándote sólo, pero si tu alma se estremece y escuchas la voz de Dios, entonces levántate con fe, declara mi nombre y comparte esta palabra con otros que también han olvidado quién soy.

Porque si hoy abriste tus ojos, si hoy no faltó el pan. Si tus huesos están firmes y tu espíritu aún no ha sido consumido, no es por suerte, soy yo el mismo que separó el mar, el mismo que resucita lo muerto, el mismo que vino, murió y venció la muerte.

”Acaso se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti» (Isaías 49: 15)

Yo te grabé en las palmas de mis manos y aunque el mundo te rechace, aunque la soledad te grite, aunque tus fuerzas se apaguen, Yo sigo aquí.

Ahora decide hijo mío. Reaccionaras con fe o con orgullo. Guardaras este mensaje como un decreto o lo olvidarás como uno más. Declara hoy Tú eres mi Dios.

Amén

Escrito por: Cristian Belbontin – hermano adventista del Septimo Dia.

 

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