fbpx

UNA GRAN PROMESAS DE AMOR

“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos.  Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a estos evita”.
Timoteo 3:1-5

Hace unos días atrás, fui a visitar un antiguo vecino y amigo que vive en Estación Central, y me vinieron recuerdos de cuando viví en este barrio durante mi niñez y juventud.

En mi cabeza vinieron vividos recuerdos de este lugar. Recuerdos de cuando pasaban tranvías por la Alameda. Yo alcancé a usarlos para ir al parque Cousiño, hoy Parque O’Higgins, nos entreteníamos con mis primos y hermanos a pescar pequeños peces de colores que llevábamos a casa y dejarlo en una pecera.

La Alameda era un hermoso paseo, tenia árboles, plantas y descanso para los vecinos. En los meses estivales podíamos escuchar: “Motemei calientito”, pasaba otro señor con un cesto con sierra ahumada, eran exquisitas, te lo entregaba en un trozo de diario recortado, y al costado de la estación de trenes, se ponía un vendedor con sus tortillas de rescoldo.

Que tiempos aquellos, las personas caminaban tranquilas a cualquier hora, por sus calles sin temor alguno, igualmente los niños y jóvenes, que jugaban en su vecindario. Se veían niños jugando al pillarse, a la escondida y jóvenes saltando unos sobre otros al caballito de bronce.

Hoy este lugar es muy peligroso, te asaltan, roban y hasta te pueden matar, el peligro viene desde cualquier lugar, maleantes que no respetan niños, señoras ni ancianos. ¿Qué paso?, ¿A que hemos llegado?, ¿Dónde quedaron esos hermosos momentos y lugares que tuvimos en el pasado?

Al ver las noticias, me doy cuenta que esto es una triste realidad en todo el país, aún mas, en todo el mundo.  La violencia se ha instalado en todo el mundo, no solo en las ciudades, hay guerras, terrorismo, donde las personas no valen nada, son asesinadas, violadas, esclavizadas y aterrorizadas. Si logran escapar de la violencia, sufren con las calamidades del cambio climático, la pandemia, lluvias torrenciales, sequias espantosas, incendios, el mar invade las costas, toda consecuencia del cambo climático. Las personas pierden sus casas, su medio de trabajo y muchos, pierden la vida.

Queridísimo amigo, lee una vez mas con mucho cuidado, el mensaje que nos dejó el apóstol Pablo, al comienzo de este mensaje. Es imposible no darse cuenta como Pablo relata los sucesos que estamos sufriendo hoy, después de dos mil años. Lee con atención, lo que dijo Pablo en su carta a Timoteo, creo acertó en todo lo que dijo.

Jesús nos relata en el evangelio del apóstol Mateo lo siguiente:
“Mirad que nadie os engañe. porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán. y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. y todo esto será principio de dolores”. Mateo 24:5-8 (esto solo es parte de la profecía, te recomiendo leer todo el capitulo 24)

Aquí Jesús nos agrega  de cuando serían los eventos de la profecía: (Mateo 24)

36 Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino solo mi Padre. 37 Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre. 38 porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, 39 y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre.

Si mi querido amigo, esto es una gran promesa de amor. Jesús nos dice todo esto por que te ama y no quiere que sufras con los eventos de los últimos tiempos, cuando Jesús vuelva y la humanidad termine.

Desde aquí te saludo y espero que leas con atención este mensaje de amor, preparado para ti y tu familia, con oración y lectura de las escrituras que nos dejaron para estos tiempos. Muchas bendiciones.

Rafael Arriaza, Adventista.

 

Deja un comentario