YA LLEGA LA NAVIDAD

“Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret,  a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María.  Y entrando el ángel en donde ella estaba, dijo: !!Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres”. Lucas 1: 26-28

Ya llega la navidad. Las vitrinas se llenan de motivos navideños, arbolitos, el viejo pascuero y a veces un nacimiento que nos recuerdo el verdadero sentido de la Navidad.

En las calles y tiendas se ven cantidad de personas que buscan el regalo favorito para sus hijos, maridos, esposas, familiares y amigos. En las empresas se participa en el amigo secreto y todo parece mas alegre.

Pero, ¿qué celebramos en la Navidad?. ¿Es el viejito pascuero?, ¿son la llegada de los Reyes magos?. NO lo que realmente la humanidad celebraba es la venida de Jesús, el nacimiento de Jesús a través de una muy buena mujer llamada María. Y la llegada de Jesús cambió al mundo, el nos trajo Amor y Esperanza para alcanzar un mundo nuevo y mejor.

Antes de la venida del salvador, el mundo estaba sumido a la muerte eterna, sin remisión, sin perdón, lo había conquistado Lucifer, el diablo. Después de la muerte en la cruz de Jesús, ganó el perdón para todos nosotros.

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¿Que quiere decir esto?, simple, que con la derrota de Lucifer se abren nuevas puertas, ya que Jesús demostró que se puede vencer al pecado, que podemos contar con Jesús como nuestro abogado y salvador, para el perdón de nuestros pecados, y además el propio Salvador nos dio la promesa antes de volver al cielo, de darnos el Espíritu Santo, quien nos ayuda y protege en los peligros de este mundo.

Querido amigo, para muchas personas la Navidad es una fiesta, alegría, regalos, cenas, y mucho mas, sin embargo para otros, que carecen de medios, esta Navidad es motivo de angustia, no tienen regalos, ni cenas, ni alegrías, y muchas veces sin familia ni amigos,  solo cuentan con la soledad, desesperanza y la tristeza. Yo lo sé porque yo pasé por esto, cuando fui extranjero en Madrid, España, pero el buen Señor se acordó de mi, y los amigos y hermanos de la Iglesia Adventista de la calle Alenza en Madrid, me visitaron con alimentos y regalos para mis hijos. Entonces querido amigo, si tienes la oportunidad de ayudar a tu prójimo, no importa quien sea, hazlo, el buen Señor lo registrará en el libro de la vida.

Ahora me despido y te digo, que Jehová te bendiga y te guarde y tengas paz, esperanza y mucho amor, y si lo estas pasando mal, escríbeme, y como dijo Pedro: “No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda”. (Hechos 3:6).

Rafael Arriaza, es Chileno / Español, MBA en Economía por la U. Autónoma de Madrid y Empresario en Chile